lunes, 25 de agosto de 2008

CRISIS, CRISIS, CRISIS, Y CRISIS



He leido que trescientos jóvenes y muy buenos economistas de sesenta países de todo el mundo se volvieron ayer a sus hogares muy preocupados. Tres días de muchas reuniones conjuntamente con premios Nobel es el motivo de la preocupación. Prácticamente todos los galardonados por la Academia de Suecia reconocen la difícil situación actual en cuento a crisis económica se refiere. Una mala gestión de riesgos y la falta de formación de muchos financieros es el motivo principal por el que se admite no tener recetas para resolverla y no saber cuánto tiempo durará.

- Myron Scholes, premio Nobel, dijo "la crisis no ha terminado y no podría estimar exactamente cuándo ni cómo finalizará". "Mientras persista la crisis, veremos más instituciones financieras en problemas, y todo será aún más doloroso para la economía mundial en lo que resta de año". Tambien dijo que "las instituciones financieras todavía necesitan recortar los préstamos y fortalecer sus balances mediante aumentos de capital adicionales y la venta de activos, lo que perjudicará a las empresas para financiar sus actividades a largo plazo".

- Robert Merton, reconoció que ahora él es mucho más pesimista que hace un año. Opina que esta se está alimentando de las pérdidas de las empresas financieras.


- Daniel McFadden, expresó su convencimiento de que la actual crisis provocada hace un año por la alta morosidad de las hipotecas de alto riesgo (subprime)en Estados Unidos seguirá golpeando a los mercados financieros y a la economía mundial. "Mientras siga la crisis vamos a ver muchas quiebras empresariales", dijo el economista estadounidense. Para que no se repitan situaciones abogó por fundar una entidad similar a la Administración de Alimentos y Fármacos de EE. UU., que supervisará y certificará los nuevos instrumentos financieros que salen al mercado para evitar así la creación de burbujas especulativas y su efecto dominó cuando estallan. De principio, buena idea. La idea se basa en que "antes, los banqueros actuaban como abogados de sus clientes, ahora ya nadie se comporta así".

- Joseph Stiglitz, premio Nobel de Economía en el 2001, comentó que el origen de la actual crisis financiera es la evidencia de un error tremendo de los reguladores y supervisores de la economía. Criticó, tambien, la actitud de los bancos y de los reguladores; dijo que "fue un fallo espectacular de los cerebros de la economía". "Había una fiesta y el regulador, que tenía el mismo pensamiento que los que participaban en ella, no quiso convertirse en un aguafiestas", concluyó el ex economista jefe del Banco Mundial.

- Robert Solow, premiado en 1984, dijo que "Si bien aún no sabemos si estamos ante una recesión global, debemos prepararnos, porque en los próximos años el crecimiento será mucho más débil". - Robert Solow, de 84 años, dijo que a su edad ya no se hace muchas ilusiones "porque en su conjunto el crecimiento económico no irá muy bien".

- Mohamed Yunus, premio Nobel de la Paz, fue mas suave: "En la medida en que nadie quiere volver a sufrir una situación mundial como la actual, confío en que este problema desaparezca apaciblemente".

A la vista de esas manifestaciones tan concretas y contundentes, entiendo que se avecinan tiempos difíciles. Todos , absolutamente todos, nos deberemos ajustar el cinturón. Yo seré el primero en dar ejemplo, pero quiero que todos los demás: empresarios, banqueros, empleados, políticos, gobierno, agentes sociales, etc. hagan lo mismo, de ello depende la “salida” de esta situación, en cuanto a forma, duración, manera, etc. para que sea lo menos traumática posible. No hay nada nuevo en lo comentado anteriormente pero hay que repetirlo constantemente y de forma vehemente.